De momento, en Moral seguimos sin presupuestos para 2022. Por tanto, trabajamos con los prorrogados del año pasado, que estaban pensados para una situación de pandemia. La oposición, que suma mayoría con las concejalas tránsfugas, votaron en contra. Entonces el alcalde presentó una moción de confianza. ¿En qué consiste? En que el alcalde pone su cargo a disposición del pleno. Y si presentan un candidato que es votado por la mayoría, cambiamos de alcalde. Pero no lo hicieron…

Por tanto, los presupuestos quedaron aprobados automáticamente… Salvo que podían presentar alegaciones… Y Mec lo hizo. Las mismas que otros años, por cierto. Diciendo que, según su entender, no se habían utilizado los “criterios máximos” de comunicación y participación posibles y se había optado por “los criterios mínimos permitidos” lo que invalidaría el proceso. Es lo que entendían… Y el resto de la oposición les compró el argumento, pese a los informes jurídicos, porque así, de nuevo, los presupuestos no salían adelante… La política del bloqueo que llevan realizando desde que Susana Villarreal y Marcia Rocabado se convirtieron en tránsfugas haciendo que la oposición sumara mayoría.

Por cierto, es verdad una cosa que dicen, que los presentamos tarde. Pero fue entre otras razones porque el Equipo de Gobierno estuvo intentando negociar con el PSOE durante bastante tiempo. Al final, al PSOE no le valía que aceptáramos el 85% de sus propuestas… ¿Porqué? Esa misma pregunta nos hacemos nosotros…

¿Qué implica esto?

El juego de trileros impide, de momento, que podamos realizar los proyectos aprobados en los Presupuestos Participativos: la construcción de una pista deportiva en Hachazuelas, La iluminación del paso entre la calle Gustavo Adolfo Bécquer y el BM y la compra de un piano para el Centro Cultural, entre otros. O sea, lo que habéis decido los vecinos.

Pero hay mucho más: la instalación de nuevas farolas, el arreglo de caminos de tierra y muros, inversiones en parques y jardines, en la biblioteca o en el Centro Cultural, la construcción de una pista de Street Basket y otra de Vóley Playa en el polideportivo. O la ampliación del pabellón municipal. O dotar de dinero suficiente a las Fiestas Patronales para que vuelvan a ser como antes de la pandemia…

En fin. Falta menos de un año para las elecciones y todo vale. Aunque los perjudicados seáis los vecinos. Luego dirán que si no hemos sido capaces, que si somos unos vagos… ¿De verdad se puede comprar ese argumento?

En resumen, no tenemos presupuestos 2022 porque PP, PSOE MEC y Susana Villareal pretenden gobernar bloqueando. Es un quiero y no puedo. Nosotros entendemos que la labor de oposición consiste en vigilar al gobierno para que haga mejor su trabajo y proponer cuestiones que mejoren lo que se está haciendo, y que eso beneficie a los vecinos.

Ellos, tienen otra idea.

La buena noticia es que por muchos palos en las ruedas que nos pongan, vamos a seguir trabajando para que los vecinos de Moralzarzal tengan los mejores servicios posibles.

 

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