El texto anterior lo publicamos en 2015, el primer año que repartimos (no sin incidentes) libros procedentes de donaciones por todo Moralzarzal. Este ha sido el tercer año, por tanto, en que celebramos el día del libro de esta manera tan especial. Seguimos preparando los paquetes con la misma ilusión, imaginando la sorpresa que seguirá siendo para algunos el encontrarse un regalo un día cualquiera en el lugar más inesperado. Esta ilusión se ve premiada incluso la misma noche en que furtivamente repartimos los libros, cuando comprobamos la estupenda acogida que tiene la iniciativa al ver que algunos de ellos han desaparecido a los pocos minutos de colocarlos.
A veces comprobamos que, en contadas ocasiones, los libros van a quien más los necesita: los que tiran al suelo los papeles que los envuelven. Bromas aparte, esperamos que también este año os haya pillado por sorpresa la lluvia de paquetes naranja y que hayáis descubierto una joya desconocida en el libro que os ha tocado. Y si no ha sido así, o aún siendolo después de leerlo queréis convertir vuestro regalo en un «libro viajero», os invitamos a que lo dejéis en los cajones con libros que hay en el Hogar del Mayor, o en el polideportivo, o en cualquier sitio donde alguien pueda aprovecharlo.
Podéis ver las fotos que hicimos durante el reparto en este enlace.
Algunas personas nos han enviado fotos de los libros que se han encontrado, las iremos dejando aquí a medida que las recibamos. Gracias a todas ellas.